Cuando una vez me dijeron que estaba loca, acepté el dictamen sin protestar: fue ésa la primera vez en la vida que se hizo justicia conmigo. Que nadie venga ahora a reclamarme cordura; mi cordura es mía y no pienso compartirla con nadie.

jueves, 22 de julio de 2010

El calor.


¿Y qué va a decir esta estúpida ahora del calor? Que ahora mismo está presente, y todo el mundo lo estamos sufriendo; y sí, se sufre. El calor nunca se disfruta: no te deja dormir, te impide salir a gusto a la calle, y te obliga a trasladar las camisetas negras hacia el fondo del armario. Sólo sirve para eso, y para bañarse en la piscina, que para el caso, ahí está la ducha, todos los días del año. ¿Aunque de verdad se sufre siempre? Por ahí dicen que hay otro tipo de calor, ese que hace que arda el colchón y que se nos incendie el cuerpo. Ese… ese sí que se disfruta, supongo. De todas formas, si queréis saber lo que es calor de verdad poneos la BATAMANTA. Mucho canchondeo, sí, sí; pero existe, y yo tengo foto con ella. Es como hacerse una foto con un billete de 500 euros, una tontería, pero solo unos pocos tontos la tienen.

lunes, 12 de julio de 2010

LOCURA


Hinchables que se golpean. Emoción. Nervios. Colgante de La Roja. "Vuvucelas". Voces. Insultos y piropos. Manos arriba y abajo. Móvil en bolsa de plástico. Cuatro clases de cervezas. Una tele. Amigos y conocidos. Pipas. Y un GOL. Locura. Batallas de cervezas y otros líquidos que no logré adivinar. Y fuente. Y "waka, waka" una y otra vez. Y una banderita de España agarrada (qué raro!). Y fuente otra vez, saltos, alegría. Abrazos y más LOCURA. Y risas con Iker y Sara. Bailes, música. Disfrutar de la misma forma que disfrutó el más forofo de todos. Cansancio. Pelo "alcohólizado", piernas negras y emoción por haber visto cómo España ganaba un Mundial. Cama. Y pocas horas más tarde, trabajo, y 35 cajas de ropa delante de mis narices a las 10 de la mañana. Dolor de cabeza. Más cansancio, mucho más, pero todavía con la alegría en el cuerpo.